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Visitas guiadas imprescindibles en Florencia

Tours privados en Florencia 

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Las obras maestras del Renacimiento

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Visita guiada - Academia florencia

El David de Miguel Ángel y sus "prisioneros"

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 Paseo por la ciudad de Florencia

Recorrido a pie por Florencia.

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Entre fuentes, grutas alquímicas, y naturaleza.

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El corazón religioso de Florencia: Duomo, cúpula, baptisterio.

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Visita guiada por la Basílica de la Santa Croce

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Visita guiada de Santa María Novella

Entre arte medieval y renacentista.

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San Lorenzo y la Capilla Medici.

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El corazón político de Florencia, su alma, su historia.

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Una de las galerías más gloriosas de Europa.

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Visita guiada por el Museo Bargello

De prisión medieval a lugar de arte.

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Museo Arqueológico Nacional - Visita Guiada

Para adultos y niños: momias y culturas lejanas.

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«Había llegado a ese punto de emoción en el que se encuentran las sensaciones celestes dadas por las Bellas Artes y los sentimientos apasionados. Saliendo de Santa Croce, me latía el corazón, la vida estaba agotada en mí, andaba con miedo a caerme». Estas son las palabras que utilizó Stendhal para describir su famosa síndrome, saliendo de la Iglesia de Santa Croce.

La síndrome de Stendhal, conocida también como síndrome de Florencia, causa palpitaciones, vértigo, confusión y alucinaciones dadas por una elevada cantidad de arte. Demasiada belleza para un solo ser humano.

Los barrios históricos de Florencia son cuatro, y cada uno tiene su propria iglesia: Santa Croce, Santa María Novella, Santo Spirito, y el barrio de San Juan donde se encuentran el homónimo baptisterio y la catedral de Santa María de la Flor.

Desde siempre las iglesias han encargado la mayoría de las obras de arte del mundo occidental.

A partir de la edad media las paredes de las iglesias florentinas, románicas y góticas, se llenaron de belleza.

Eran las mismas iglesias o, la mayoría de las veces, las poderosas familias florentinas que tenían el patronato de las capillas al interior de una iglesia, que encargaban frescos, retablos, y más tarde estatuas o monumentos fúnebres prestigiosos.

Será la majestuosidad de la catedral de Santa María de la Flor en su estilo gótico toscano, la solemnidad del románico baptisterio de San Juan Bautista y las volutas de la Basílica de Santa María Novella a acoger a los visitadY estas son sólo unas de las iglesias florentinas que merecen la pena visitar, recordamos también la iglesia de San Lorenzo y las Capillas Medici, la Iglesia de Santa María del Carmine que aloja la Capilla Brancacci, decorada con los que se consideran los primeros frescos del renacimiento, y la sugestiva Basílica de San Miniato a monte… entre otras, estas son sólo unas de las maravillosas iglesias florentinas. Desde la edad media hasta la edad moderna Florencia se llena de arte, y las iglesias son testimonios de esa belleza. Una visita guiada de las iglesias florentinas es un perpetuo dejarse abrazar por otros tiempos.

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